Carlos Durango, un profesional apasionado por el deporte
Casta de Campeones - Secretaría de Deporte, Recreación y Cultura de Risaralda.
Hugo Ocampo Villegas.
Nuestro fisioterapeuta Carlos Enrique Durango Henao conservando esas raíces del conocimiento médico de su padre Carlos Augusto se apasionó por le deporte optando por profesionalizarse en carreras afines a la actividad, mientras su hermana María se hacía también médica.
Carlos Enrique, quien lleva ‘cinco maravillosos años’ como él mismo lo dice en la Secretaría de Deporte, Recreación y Cultura de Risaralda, adelantó dos carreras que hoy hacen parte de su perfil laboral: primero se graduó en Ciencias del Deporte y la Recreación y luego en Fisioterapia y Kinesiología, ambas carreras en la Universidad Tecnológica. Luego hizo una especialización en Salud Ocupacional en la Universidad Libre.
Oriundo de la Virginia, sus estudios de primaria y secundaria los adelantó en el Colegio De La Salle. En su época de juventud practicó la natación y el fútbol. Ese apasionamiento por el deporte lo llevó a definir su rasgo profesional:
“Me entusiasma trabajar con el deporte, bastante. Por eso estudié carreras relacionadas con esta actividad. Ahora sentir que puedo ayudar a los deportistas de alto rendimiento en esos planes de vida y sus objetivos es una sensación agradable, compartir con ellos es algo indescriptible, me emociona”

Estar tan cerca de ellos, en especial cuando requiere de su atención profesional, lo involucra en sus vidas, tanto que en los pasados Juegos Nacionales le pidió permiso al médico Johnny Ospina para que lo asignara para las competencias de subacuáticos pues quería estar cerca de Jairo Andrés Grajales, quien estuvo en duda para ir a Cartagena debido a un proceso de recuperación de una cirugía en un tobillo que finalmente superó con su ayuda:
“Yo he tenido varios casos de fisioterapia con deportistas de Risaralda pero uno que me marcó mucho fue con Jairo Andrés de subacuáticas. Estaba en duda su participación en los Juegos pues venía de una cirugía de tobillo con más de un año en terapia. El día que competía le dije al médico Ospina que quería estar allá. Hizo parte del equipo que ganó bronce en la prueba de relevos en aguas abiertas. Nos abrazamos por esa medalla y la gente de actividades subacuáticas me lo agradeció”.
La pregunta es obligada… ¿Cómo ha sido la atención a los deportistas en esta época de la pandemia que estuvo signada por una larga cuarentena?.
“Todo ha sido nuevo y muy rápido, todo cambio tiene su proceso de adaptación que a veces es difícil y más trabajar virtualmente la fisioterapia que es una atención muy presencial, es difícil hacer terapia por internet, pero en el UCAD los atendíamos con video llamadas, les elaborábamos un plan casero, mostrándoles como hacer los ejercicios, ha sido una nueva experiencia en la que tocó aplicar nuevas técnicas y estrategias, pero evidentemente con sus limitaciones”.
¿Y cuáles son esas lesiones más frecuente entre nuestros deportistas?
“Mucha lesión de hombro y tendinitis, aparte de las reiteradas contusiones y esquinces y no pocos casos de fracturas”.
El fisioterapeuta y profesional del deporte y la recreación, Carlos Enrique Durango Henao, trabaja con amor por nuestra ‘Casta de Campeones’.